Tendinopatía rotuliana
¿Qué es la tendinopatía rotuliana?
Consiste en la inflamación del tendón rotuliano, que es el que conecta la rótula con la tibia. Este tendón trabaja con los músculos de la parte frontal del muslo para extender la rodilla y así hacer el movimiento para correr, saltar y patear.
A la tendinopatía rotuliana también se la conoce como “rodilla del saltador” ya que se trata de una lesión común en runners, atletas, ciclistas y jugadores de baloncesto, futbol o voleibol. También puede afectar a las personas que tengan una actividad diaria que les suponga un esfuerzo para las rodillas.
Síntomas
Los síntomas son dolor, especialmente al doblar o estirar la rodilla, al subir las escaleras o en la práctica deportiva, además de sensibilidad en la zona y engrosamiento del mismo. El dolor se manifiesta entre la rótula y la parte que conecta el tendón con la tibia.
Causas y factores de riesgo
La tendinitis rotuliana se produce por un uso excesivo y frecuente del tendón unido a una biomecánica articular deficiente. La tensión generada ocasiona pequeños desgarros que llevan a la inflamación y debilitamiento. Si esta situación continúa desemboca en una tendinopatía.
Los factores de riesgo están relacionados con la actividad física, el desequilibrio o rigidez muscular y algunas enfermedades crónicas como la artritis reumatoide o la diabetes.
Tratamiento
En Fisalde comenzamos por determinar la razón por la cual el tendón no puede soportar la carga (deportiva, laborar o cotidiana) para reducirla. Después optimizamos la biomecánica y funcionalidad de la articulación con técnicas osteopáticas y de terapia manual.
Para el control del dolor y de la inflamación y avanzar en una recuperación óptima usaremos técnica de Electrolisis Percutánea Intratisular (EPI), Ondas de choque, Láser, Diatermia y Vacusport.